Un hombre identificado como Vem Miller fue detenido el pasado sábado en Coachella, California, en un todoterreno negro, minutos antes de que el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, realizara un mitin en la localidad. Miller, miembro de una organización de derecha y residente de Las Vegas, Nevada, fue arrestado en posesión de una escopeta ilegal, una pistola cargada, un cargador de alta capacidad y pases VIP falsos. Las autoridades han calificado el incidente como el «posible tercer intento de asesinato» contra Trump. Afortunadamente, el evento no comprometió la seguridad del ex mandatario ni de los asistentes. Miller fue liberado tras pagar una fianza de 5,000 dólares y se espera que comparezca ante el juez el 2 de enero de 2025.
Este intento frustrado de ataque se añade a dos situaciones previas: en julio, Trump fue herido de bala en una oreja durante un mitin en Pensilvania, y en septiembre, un individuo armado fue detenido cerca de su club de golf en Florida. Ante estos incidentes, se han intensificado las medidas de protección alrededor del ex presidente, incluyendo la instalación de paneles de cristal a prueba de balas en sus eventos. Mientras tanto, Trump continúa su campaña electoral en estados con inclinaciones demócratas, donde busca consolidar su posición de cara a las elecciones presidenciales, apoyado por la ventaja que mantiene en los estados indecisos clave a pesar de ir por detrás en las encuestas generales. En su aparición en Coachella, un escenario inusual por su asociación con eventos culturales demócratas, Trump criticó a California y reiteró su mensaje invitando al público a hacer América grande nuevamente.
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