Este jueves, la delegada de Economía, Innovación y Hacienda, Engracia Hidalgo, junto a las concejalas de Chamartín, Yolanda Estrada, y de Arganzuela, Lola Navarro, realizaron una visita destacada a la heladería Bibí e Bibó, localizada en la calle López de Hoyos. Esta heladería, conocida por su producción artesanal de helados y dulces, es dirigida por una familia italiana que ha sabido conquistar el paladar madrileño.
Durante su visita, Hidalgo resaltó el «carácter emprendedor» y el «espíritu innovador» del comercio madrileño, adjetivos que consideró sinónimos de prestigio y calidad. «El comercio local es una pieza fundamental en el tejido económico de nuestra ciudad», mencionó la delegada, subrayando la importancia de apoyar y fomentar este tipo de negocios que generan un impacto positivo en la comunidad.
La heladería Bibí e Bibó ha sabido combinar tradición y modernidad en su propuesta, hecho que Hidalgo no dudó en destacar. «Este tipo de establecimientos representan verdaderamente el potencial de la innovación en el ámbito tradicional, logrando mantener vivas las raíces mientras se adaptan a las demandas contemporáneas», afirmó.
Por su parte, las concejalas Yolanda Estrada y Lola Navarro coincidieron en la necesidad de seguir impulsando iniciativas que fortalezcan el comercio local. «Es vital que sigamos promoviendo políticas que protejan y fomenten el crecimiento de estos negocios, que no solo enriquecen nuestra economía, sino que también contribuyen a la diversidad cultural de Madrid», expresó Estrada.
La visita culminó con una cata de algunos de los productos emblemáticos de la heladería, donde se pudo apreciar la calidad y dedicación que cada miembro de la familia imprime en su elaboración. En un contexto de desafíos económicos, el ejemplo de Bibí e Bibó se erige como un símbolo del esfuerzo y la resiliencia del comercio madrileño contemporáneo.