Testigos y supervivientes han narrado escenas de horror tras un ataque en una iglesia, donde un individuo vestido de negro y con un pasamontañas abrió fuego indiscriminadamente. Los presentes describieron cómo los niños, aterrorizados, se escondieron entre los bancos para protegerse de los disparos. Relatos de los sobrevivientes destacan la atmósfera de pánico y desconcierto mientras el atacante se movía por el lugar, sembrando el caos entre los feligreses reunidos para una ceremonia.
El incidente ha generado una ola de conmoción en la comunidad, que ahora lidia con las secuelas del ataque. La policía, que llegó rápidamente al lugar, está investigando los motivos detrás de este brutal acto de violencia. Las autoridades locales han prometido reforzar la seguridad en lugares de culto y han instado a la población a mantenerse alerta, mientras familiares y amigos de las víctimas se unen en vigilia para recordar a los que perdieron la vida en esta tragedia.
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