Heidi Klum ha vuelto a deslumbrar en la fiesta de Halloween, consolidando su estatus como la reina indiscutible del evento. Este año, la modelo y presentadora alemana, de 52 años, sorprendió a todos en Nueva York con un impresionante disfraz de medusa. Completo con un nido de serpientes en movimiento como tocado, Klum hizo honor a su promesa de ser terrorífica, cubriendo su cuerpo con escamas verdosas que desembocaban en una cola serpentina. El proceso de transformación, documentado en redes sociales, comenzó desde la tarde y culminó en el Hard Rock Hotel, donde Klum posó junto a su esposo Tom Kaulitz, quien se disfrazó de guerrero de piedra.
La minuciosa transformación fue facilitada por el experto en prótesis Mike Marino, conocido por su trabajo en la industria cinematográfica. La dedicación de Klum a sus disfraces ha sido un sello distintivo de sus celebraciones de Halloween, logrando cada año atraer la atención mediática. Además de su propia presencia impactante, la fiesta contó con la participación de reconocidos invitados y marcas como Empire State Building y Butterfinger. Mientras que en años anteriores se transformó en personajes icónicos como E.T. y un pavo real, Klum ha demostrado una vez más su creatividad y compromiso con la temática de Halloween, dejando una impresión duradera en el imaginario colectivo.
Leer noticia completa en El Pais.


