A tan solo 31 días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, la candidata demócrata Kamala Harris mantiene una ligera ventaja en las encuestas nacionales frente al ex presidente y candidato republicano Donald Trump. Harris obtiene un 49,1% de apoyo, superando a Trump, que se encuentra con un 46,9%, según la media general de los sondeos publicados. Sin embargo, a pesar de esta ventaja en el voto popular, el sistema del Colegio Electoral podría favorecer a Trump, quien cuenta con 281 votos electorales frente a los 257 de Harris, lo que le otorgaría la presidencia. La competencia se intensifica en varios estados clave como Arizona, Georgia, Carolina del Norte, Pensilvania, Michigan y Wisconsin, que juntos suman un significativo número de votos electorales necesarios para decidir el resultado.
En esta contienda, Harris enfrenta desafíos en captar el apoyo de la clase media trabajadora y el voto latino, crucial en estados como Nevada y Arizona. Además, su elección del gobernador de Minnesota, Tim Walz, como compañero de fórmula, no ha brindado los beneficios esperados debido a controversias relacionadas con su historial. Mientras tanto, Trump se fortalece en estados como Florida, Ohio y Texas, que ya tiene asegurados. La campaña se centra ahora en los estados indecisos, donde ambos candidatos buscan captar los votos finales necesarios. Las encuestas reflejan una carrera reñida, especialmente en Pensilvania, considerado el estado más crucial de esta elección, donde los dos candidatos se encuentran prácticamente empatados.
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