En un avance significativo hacia la tregua entre Hamás e Israel, tres mujeres israelíes, Romi Gonen, Emily Damari y Doron Steinbrecher, fueron liberadas este domingo por la tarde en el marco de un acuerdo de alto el fuego que inició en la mañana. Las mujeres, quienes habían permanecido cautivas durante más de 15 meses, fueron retransmitidas en televisión custodiadas por milicianos de Hamás antes de ser entregadas al Comité Internacional de la Cruz Roja. Posteriormente, fueron transportadas a un hospital en Tel Aviv, donde se reencontraron con sus familias. El gobierno israelí celebró la liberación, mientras que el ala militar de Hamás reiteró su compromiso con el alto el fuego, solicitando a los países mediadores (Qatar, Egipto y Estados Unidos) presionar a Israel para mantener el acuerdo.
El ambiente en Gaza fue de celebración tras el cese de hostilidades, que permitió la circulación de desplazados regresando a sus hogares entre escombros, y el despliegue público de milicianos, interrumpido durante los intensos 15 meses de ofensiva. Sin embargo, la tregua enfrenta desafíos políticos: el acuerdo desencadenó la renuncia de tres ministros del partido ultranacionalista Poder Judío en Israel, en desacuerdo con el gobierno de Netanyahu. El primer ministro, pese a las divisiones, aseguró que el alto el fuego es temporal y reiteró que tanto la actual administración estadounidense como la próxima respaldan reanudar acciones militares si las negociaciones no avanzan. La situación, aún frágil, prevé más liberaciones y desafíos diplomáticos en las próximas semanas.
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