En un golpe de suerte digno de las historias de hallazgos fortuitos, una tienda de segunda mano en Amberes ha vendido una cerámica firmada por Pablo Picasso por 12,600 euros. La pieza, datada en 1953 y encontrada entre objetos donados, es parte de una edición limitada realizada en colaboración con el taller de cerámica Madoura, en el sur de Francia. El descubrimiento de esta obra se atribuye al buen ojo de un empleado de Kringwindkel, la organización sin ánimo de lucro que administra la tienda, cuyos trabajadores son personas que requieren apoyo para reincorporarse al mundo laboral. Esta venta se suma a inclusiones anteriores de arte significativo en donaciones, como un grabado de James Ensor, lo que refuerza la idea de que los objetos con valor cultural e histórico continúan emergiendo en los lugares más insospechados.
El plato de gran tamaño, en excelente estado y adornado con escenas taurinas características del estilo de Picasso, fue subastado en línea y adquirido por un coleccionista identificado como Johan. Aunque él planea disfrutar de su adquisición en su hogar por un tiempo, ha expresado su intención de eventualmente donar la cerámica a una organización benéfica para jóvenes con autismo, un trastorno que también le ha sido diagnosticado. El resultado final de la subasta no se compara con las sumas multimillonarias de otras obras del artista malagueño, pero será reinvertido en programas de empleo social ofrecidos por la organización de ventas de segunda mano, que incluyen cursos de formación y puestos de trabajo especializados. Tan solo en enero, otro descubrimiento similar enriqueció la colección del Museo Real de Bellas Artes de Amberes, lo que confirma el impacto positivo del enfoque social y formativo del personal en detectar piezas de valor cultural en estas tiendas.
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