El fenómeno de recordar vidas pasadas ha capturado la imaginación y el interés de diversas culturas y religiones, especialmente en filosofías como el hinduismo y el budismo que creen en la reencarnación. A nivel científico, el concepto sigue siendo una intrigante frontera sin respuestas concluyentes. Investigaciones de psicólogos y psiquiatras, incluidos los estudios pioneros de Ian Stevenson, han documentado casos de niños que recuerdan vidas anteriores con detalles sorprendentes. A pesar de lo provocativo de estos testimonios, la ciencia busca explicaciones alternativas como la memoria falsa o el trabajo del subconsciente, sin encontrar aún una base sólida. La hipnosis regresiva se presenta como una técnica para explorar estos recuerdos, aunque carece del respaldo de evidencia científica robusta y es propensa a crear memorias implantadas.
Diversos métodos han sido propuestos para aquellos interesados en acceder a memorias de vidas pasadas. Entre ellos, destacan la hipnosis regresiva, la meditación profunda, los diarios de sueños y las lecturas psíquicas. La hipnosis regresiva es popular aunque polémica por sus riesgos, mientras que la meditación requiere constancia y es parte de filosofías que promueven la reencarnación. Otros enfoques como los registros akáshicos y la visualización guiada también son mencionados, aunque ninguno cuenta con validación científica. A pesar de la falta de pruebas concluyentes, estas prácticas son vistas por muchos como herramientas de introspección o desarrollo espiritual. Es crucial abordar estas prácticas con cautela y supervisión profesional para evitar creaciones de falsos recuerdos o experiencias emocionales negativas.
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