Los Mossos d’Esquadra han logrado identificar a los agresores de un menor tras la difusión de un video en redes sociales, donde se evidencia el ataque brutal grabado con un móvil. La grabación, que rápidamente se viralizó, muestra a varias personas golpeando al menor sin piedad. El contenido provocó un gran revuelo en la comunidad, causando indignación y generando un amplio debate sobre el uso de las redes sociales para la denuncia de actos violentos. Las autoridades resaltaron la importancia de las redes en la identificación de los sospechosos, lo que permitió agilizar la intervención policial y el inicio de las investigaciones pertinentes.
El video del incidente fue clave para que los investigadores pudieran localizar a los implicados, quienes, según fuentes policiales, podrían enfrentar cargos por agresión. Este caso ha puesto de relieve tanto la brutalidad del suceso como la eficacia de las plataformas digitales para rastrear actividades ilegales. Además, ha resurgido la discusión sobre la seguridad de los menores en espacios públicos y el papel de la sociedad en la protección de los mismos. La difusión de este tipo de material plantea también interrogantes sobre la ética y la privacidad, subrayando la necesidad de un equilibrio entre el uso de las redes sociales para justicia social y el respeto a los derechos individuales.
Leer noticia completa en El Mundo.