En el tercer trimestre de 2024, Google Cloud, la división de servicios en la nube de Alphabet, ha experimentado un notable impulso en su crecimiento financiero. Según el reciente informe, la compañía alcanzó ingresos de 11.400 millones de dólares, lo que representa un incremento del 35 % en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este auge ha sido propulsado por la creciente adopción de la inteligencia artificial generativa (GenAI) por parte de sus clientes, lo que también ha favorecido un aumento en el margen operativo, situándose ahora en un 17 %.
El beneficio operativo de Google Cloud ha presentado un crecimiento espectacular, multiplicándose por siete hasta alcanzar los 1.900 millones de dólares desde los 266 millones correspondientes al año pasado. Sundar Pichai, CEO de Alphabet, subrayó las oportunidades crecientes para el negocio de la nube, vinculadas a la mayor aceptación de la IA generativa.
Por otro lado, Alphabet sigue realizando inversiones significativas en sus infraestructuras, con un gasto de capital o Capex que alcanzó los 13.000 millones de dólares en este trimestre, en comparación con los 8.100 millones de 2023. De acuerdo con Anat Ashkenazi, CFO de Alphabet, un 60 % de este presupuesto fue destinado a servidores y el 40 % restante a equipos de centros de datos y redes. Ashkenazi anticipa que el gasto para el último trimestre de 2024 será similar, aunque se prevé un incremento adicional en 2025, aunque no tan pronunciado como el de este año.
En línea con su estrategia de expansión, Google ha comprometido más de 7.000 millones de dólares en inversiones para centros de datos, de los cuales 6.000 millones están destinados a operaciones dentro de Estados Unidos. La empresa está enfocada en optimizar su infraestructura física y mejorar la eficiencia operativa mediante la implementación de IA. Según Ashkenazi, esto permitirá perfeccionar la eficiencia técnica y simplificar operaciones.
En cuanto a la estructura interna de la compañía, Pichai y Ashkenazi han manifestado sus esfuerzos por mejorar la eficiencia operativa, lo que podría implicar una reestructuración de la plantilla. No obstante, no han dado detalles específicos sobre si esto resultará en la expansión o posible reducción de personal.
El informe financiero llega en un contexto de fuerte competencia en el sector de la nube. Microsoft ha acusado a Google de liderar «campañas en la sombra» para perjudicar su imagen ante los reguladores y el público general. Google, por su parte, ha replicado afirmando que sus preocupaciones respecto a las prácticas de licencias de Microsoft han sido manifiestas, alegando que dichas prácticas son anticompetitivas y afectan la ciberseguridad y la innovación. En este escenario de rivalidad, se espera que Microsoft y Amazon Web Services, los principales competidores de Google en el sector cloud, revelen sus resultados financieros en los próximos días.