El Gobierno de España, junto a la Junta de Andalucía, la Diputación de Sevilla y el Ayuntamiento de Sevilla, han dado un paso significativo al firmar un protocolo con el objetivo de iniciar la exhumación de la fosa ubicada en el Monumento de la capital andaluza. Este acuerdo marca un momento crucial en los esfuerzos por recuperar la memoria histórica y dignificar a las víctimas de la represión franquista enterradas en dicho emplazamiento.
El acto de firma, celebrado en un ambiente de solemne reconocimiento, subraya el compromiso conjunto de las administraciones por abordar esta deuda histórica. La fosa, situada en un lugar emblemático de Sevilla, se ha convertido en un símbolo de los reclamos de familiares y colectivos que, durante décadas, han exigido justicia y reparación.
La ministra de Justicia, presente en el evento, destacó la importancia de esta iniciativa como parte de un proceso más amplio de reconciliación y recuperación de la memoria histórica. «Este es un paso esencial para cerrar heridas y rendir homenaje a quienes perdieron la vida defendiendo sus ideales», afirmó.
El presidente de la Junta de Andalucía también subrayó la relevancia de esta colaboración interinstitucional, señalando que la exhumación permitirá arrojar luz sobre una parte oscura de la historia reciente. «Comprometernos con la verdad y la justicia es nuestra responsabilidad moral y política», declaró.
Por su parte, el presidente de la Diputación y el alcalde de Sevilla enfatizaron la necesidad de avanzar con celeridad y sensibilidad en las actuaciones previstas. Ambos representantes se comprometieron a facilitar todos los recursos necesarios para llevar a cabo el proceso de manera digna y respetuosa.
Se espera que las labores de exhumación comiencen en los próximos meses, contando con un equipo de expertos que garantizarán el rigor y el respeto durante todo el proceso. Las autoridades han subrayado la importancia de mantener una comunicación continua con los familiares de las víctimas, quienes recibirán información regular sobre los avances.
Este acuerdo representa una convergencia de voluntades políticas y sociales para afrontar uno de los episodios más dolorosos del pasado español. Para muchas familias, el próximo inicio de las excavaciones constituye un anhelado paso hacia el cierre de un capítulo lleno de dolor e incertidumbre, mientras el compromiso con la verdad y la memoria sigue marcando la agenda pública.
Fuente: Ministerio Políticas Territoriales y Memoria Democrática.