La multinacional Gi BPO ha dado un paso adelante en el ámbito de la seguridad laboral con la implementación de una innovadora herramienta de inteligencia artificial denominada SILA. Este avanzado sistema, diseñado específicamente para la detección de proximidad en carretillas elevadoras, tiene la capacidad de alertar a los conductores cuando peatones, objetos u otros vehículos se encuentran demasiado cerca, con el fin de prevenir accidentes.
En un contexto donde la seguridad y el bienestar de los trabajadores se han convertido en una prioridad central de las estrategias corporativas, la incorporación de la inteligencia artificial está remodelando diversas áreas organizativas, incluida la prevención de riesgos laborales. Gi BPO, parte de Gi Group Holding y especializada en ofrecer soluciones de outsourcing avanzado en logística para sectores como la automoción, la industria química y farmacéutica, ha incorporado el SILA Detection System forklift trucks en sus instalaciones como parte de su compromiso con la seguridad laboral.
Noelia Domínguez, Health & Safety Manager de Gi BPO, destaca que “la seguridad de los empleados es un tema crucial en nuestra compañía. Integrar la inteligencia artificial en nuestras fábricas no solo revolucionará la industria automovilística, sino también la forma de proteger a los empleados. Gracias a estos sistemas de IA podemos identificar y prevenir riesgos que a largo plazo pueden convertirse en un problema”.
El SILA Detection System emplea tecnología de aprendizaje profundo y análisis neuronal, lo que le permite a la cámara reconocer personas, máquinas y objetos a una distancia de hasta 20 metros en tiempo real. Esta capacidad de advertir a los conductores sobre posibles riesgos de colisión representa una mejora sustancial en la seguridad del entorno laboral.
El sistema posibilita la instalación de hasta cuatro cámaras de inteligencia artificial simultáneamente, proporcionando una visibilidad de 360 grados. Además, cada cámara puede ser parametrizada de manera independiente para ajustarse a las necesidades específicas de cada área de trabajo, como la velocidad y la distancia de reacción ante una detección. Las alertas se activan mediante señales acústicas y luminosas, avisando tanto al conductor como al peatón de cualquier riesgo.
El coste de implementación de este sistema es mínimo gracias a su modalidad de alquiler mensual, y los beneficios asociados a la reducción de accidentes justifican sobradamente la inversión. Francisco Jose Fernandez, Logistics & Industry Division Manager de Gi BPO, expone que “aunque este sistema de inteligencia artificial no elimina el 100% de los accidentes, sí los reduce de forma muy significativa. Además, permite tomar decisiones críticas sobre modificaciones y mejoras en las instalaciones, así como en la formación necesaria para los conductores que operan estos equipos”.
En este marco, Gi BPO reafirma su compromiso con la seguridad laboral, avanzando en la adopción de tecnologías de vanguardia que fomenten un entorno de trabajo más seguro y eficiente.