La mañana de este martes en Madrid, frente al Ministerio de Hacienda, se llevó a cabo una manifestación de empleados públicos organizada por los sindicatos UGT y CC OO, en la que participaron aproximadamente 2.000 personas. Los manifestantes protestaron por lo que califican como «compromisos incumplidos» por parte del Gobierno español, especialmente en relación con la falta de negociación para un aumento salarial en 2025 y otras promesas no cumplidas, como la promoción interna y la clasificación profesional del personal público. A pesar de que el Gobierno aprobó recientemente un aumento retroactivo del 0,5% para 2024, los sindicatos consideran inadecuada la oferta de empleo público propuesta, que rondaría las 20.000 plazas, según CSIF.
La protesta también abordó el persistente problema de la alta temporalidad en el sector público, que ha llevado a la congelación de fondos europeos por 626 millones de euros, según la Comisión Europea. Los representantes sindicales, Isabel Araque y Lucho Palazzo, enfatizaron la urgencia de estabilizar el empleo público y rejuvenecer las plantillas para evitar que el 30% de los empleados actuales desaparezcan en menos de una década. CSIF, por su parte, exige al Gobierno que elimine la tasa de reposición y aplique sanciones a los gestores que perpetúan la temporalidad, mientras busca implementar planes estrictos de recursos humanos para enfrentar esta situación.
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