En un esfuerzo por simplificar la experiencia digital de sus usuarios, Microsoft ha comenzado a desplegar una innovadora funcionalidad que permitirá compartir archivos de manera fluida entre dispositivos iPhone y ordenadores con Windows 11 o Windows 10. Esta herramienta llega a través de las aplicaciones Phone Link y Link to Windows, anunciando un nuevo capítulo en la integración entre las plataformas de Apple y Microsoft.
Para beneficiarse de esta nueva capacidad, los usuarios deben asegurarse de cumplir ciertos requisitos técnicos. El iPhone debe operar con la versión iOS 16 o superior, y tener instalada la aplicación Link to Windows en al menos su versión 1.24112.73. En el ordenador, será necesaria la presencia de Phone Link, versión 1.24112.89.0 o superior, y pertenecer al Programa Windows Insider, que da acceso anticipado a nuevas características.
Durante la instalación de Phone Link, los usuarios primerizos de iPhone con esta aplicación tendrán la opción de habilitar el intercambio de archivos. Para aquellos con dispositivos ya vinculados, la activación puede realizarse mediante el enlace especial aka.ms/addAccount disponible desde el PC.
La transferencia de archivos desde un iPhone es un proceso intuitivo: se seleccionan los archivos deseados, se pulsa el ícono de compartir, se elige “Link to Windows” y luego el dispositivo receptor. A la inversa, para enviar archivos desde un ordenador al iPhone, basta con hacer clic derecho sobre los archivos, seleccionar «Compartir» y luego «Mi Teléfono» o «Phone Link», según corresponda.
Esta herramienta representa un avance significativo para usuarios que realizan transferencias constantes entre sus dispositivos, eliminando la dependencia de cables o servicios externos de almacenamiento. Además, Microsoft ha incorporado una opción para que los usuarios envíen comentarios y sugerencias a través del Feedback Hub, asegurando así un canal directo de retroalimentación.
Desarrollada por el equipo del Programa Windows Insider, esta funcionalidad se perfila como un puente hacia una mayor interoperabilidad y experiencia integrada entre productos de Windows y Apple. Su implementación gradual promete hacer realidad el anhelo de una conectividad sin fisuras en el ecosistema digital moderno.