Fujitsu ha dado un nuevo paso al frente en su colaboración con NVIDIA para impulsar el desarrollo de una infraestructura de inteligencia artificial (IA) que trascienda los límites actuales. La ampliación de esta asociación tiene como meta no solo fortalecer la competitividad empresarial, sino también fomentar la autonomía en el uso de tecnologías avanzadas, con un enfoque especial en sectores como la sanidad, la fabricación y la robótica.
En el núcleo de esta iniciativa se encuentra la creación de una plataforma de agentes de IA. La combinación de las CPU FUJITSU-MONAKA y las potentes GPU de NVIDIA, conectadas a través de la tecnología NVIDIA NVLink Fusion, posibilitará el desarrollo de agentes que no solo aprendan, sino que también se adapten continuamente, superando las barreras actuales de los sistemas informáticos tradicionales.
El lanzamiento de esta colaboración se centrará inicialmente en Japón, con un claro objetivo de promover una adopción masiva de la IA que mejore la competitividad en múltiples sectores y contribuya a establecer una sociedad más sostenible. Takahito Tokita, CEO de Fujitsu, ha subrayado la trascendencia de unir esfuerzos para acelerar la transformación digital, especialmente en Japón, reconocido líder mundial en manufactura.
Por su parte, Jensen Huang, fundador y CEO de NVIDIA, ha destacado que la revolución industrial impulsada por la IA está en pleno apogeo y que construir la infraestructura necesaria es fundamental. Este esfuerzo conjunto refleja el compromiso de ambas compañías por liderar la innovación y avanzar en la evolución tecnológica.
Los objetivos de esta alianza incluyen el desarrollo de plataformas de IA personalizables para múltiples sectores y la creación de infraestructura informática avanzada que permita una adopción más amplia de la IA en la industria. Además, se busca estimular la creación de casos de uso innovadores y establecer un ecosistema sólido que facilite el acceso y la utilización de estas tecnologías.
Fujitsu confía en que esta colaboración abrirá nuevos mercados y oportunidades previamente inaccesibles, sentando así las bases para una sociedad digital avanzada en Japón de cara al 2030. Esta estrategia no solo promete acelerar el crecimiento del mercado de la IA empresarial, sino que también generará un valor social significativo.