La multinacional alemana FUCHS Lubricantes ha anunciado un ambicioso proyecto de expansión y modernización en su planta de Castellbisbal, Barcelona, con una inversión de 11 millones de euros. Esta iniciativa busca incrementar tanto su capacidad de producción como sus esfuerzos en investigación, en línea con su estrategia de crecimiento para el año 2024. Con esta medida, la compañía tiene como objetivo impulsar su presencia en el mercado mediante innovaciones tecnológicas y acciones orientadas a la sostenibilidad.
La inversión permitirá integrar mejoras significativas, especialmente en la automatización de procesos, lo que se espera incremente la facturación de la empresa en un 10%, alcanzando los 81 millones de euros. Una parte crucial del plan es la diversificación en mercados de especialidad. FUCHS tiene en la mira sectores de crecimiento emergente como la energía eólica, la industria alimentaria y de bebidas, así como la fabricación de vehículos y componentes automotrices. Asimismo, el fortalecimiento de la red de distribución hacia clientes profesionales, incluidos flotas de transporte, talleres y concesionarios, es uno de los objetivos estratégicos más relevantes.
La apuesta por la innovación se refleja en el enfoque de la compañía hacia la automatización y expansión de sus capacidades productivas. Las mejoras incluyen el desarrollo de soluciones de lubricación para nuevas especialidades y la optimización del almacenamiento de productos automotrices, ahora en envases más pequeños. Castellbisbal, que opera con neutralidad de carbono desde 2020, continúa siendo un referente en sostenibilidad dentro del sector.
El director general de FUCHS Lubricantes, Eladio Cuadrado, ha subrayado que esta inversión impulsa la eficiencia operativa y resalta el compromiso sostenible de la empresa. La renovación y expansión de las instalaciones incluyen un aumento de 500 m² en los laboratorios de I+D, lo que ha permitido adquirir nuevos equipos de ensayo y análisis. Estos avances son fundamentales para el desarrollo de productos energéticamente eficientes y el uso de materias primas sostenibles.
En adición, FUCHS cuenta con un laboratorio de microbiología único en el grupo, diseñado para adaptar productos a diversas condiciones locales. El compromiso y la dedicación de los más de 150 empleados de España han sido vitales para la evolución de la empresa. La renovación de aproximadamente el 40% del personal en los últimos cinco años, junto con la implementación de metodologías Lean, ha mejorado su capacidad para atender una creciente demanda.
Con más de 90 años de historia, el Grupo FUCHS se reafirma como líder en su sector, basando su éxito en la sostenibilidad, la innovación y el compromiso de su equipo. Esta nueva inversión no solo fortalece su posición en el mercado, sino que también prepara a la compañía para futuros desafíos y oportunidades, consolidando su liderazgo en la industria de los lubricantes.