Francis Kéré, galardonado con el premio Pritzker y el Imperiale de Japón, vuelve a trabajar en proyectos educativos, esta vez en Alemania. El arquitecto burkinés, conocido por sus proyectos en Burkina Faso, colaborará con expertos en construcción de madera para erigir un parvulario en Múnich, financiado por Ingerborg Pohl. El edificio, que acogerá a hijos de trabajadores de la Universidad Técnica de Múnich, combinará rampas, terrazas y una cubierta vegetal para fomentar la curiosidad y el descubrimiento en los niños. La construcción, que se completará a finales de 2025, busca equilibrar protección y libertad en sus espacios.
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