En un reciente encuentro informativo, la consejera de Economía, Hacienda y Empleo, Rocío Albert, presentó una ambiciosa iniciativa del Gobierno autonómico que busca transformar el tejido empresarial de la Comunidad de Madrid mediante la especialización territorial. El proyecto tiene como objetivo principal atraer nuevos inversores y mejorar la oferta de servicios del sector público a las empresas.
Albert detalló que el plan incluye el desarrollo de distritos industriales estratégicos respaldados por los ayuntamientos locales, los cuales promoverán una fiscalidad favorable y una regulación inteligente. Estos distritos servirán como núcleos de colaboración entre empresas, clústeres sectoriales, universidades y centros de investigación, permitiendo la innovación compartida en tecnología, investigación y logística.
Uno de los pilares de la propuesta es la creación de una ventanilla única que facilitará a las empresas el acceso a recursos productivos y administrativos. Este servicio, coordinado con las autoridades municipales, proporcionará asesoramiento sobre inversiones, identificación de ubicaciones óptimas y simplificación de trámites burocráticos.
Para abordar las necesidades de formación, se implementarán programas adaptados a las empresas locales. Estos planes incluirán desde el diagnóstico de competencias hasta acuerdos y seguimiento personalizado, con el fin de atraer y formar a talento para sectores clave, mejorando así la empleabilidad y competitividad regional.
La consejera subrayó el compromiso del gobierno regional con esta estrategia, que califica como “innovadora y eficiente”, para fortalecer la colaboración empresarial y generar empleo cualificado. Dos distritos iniciales recibirán 200.000 euros anuales de inversión: uno en el Norte, orientado a biofarma y aeroespacial, y otro en el Sur y Corredor del Henares, enfocado en logística, transporte y defensa.
Estos distritos se desarrollarán mediante convenios de colaboración con ayuntamientos y asociaciones empresariales, los cuales establecerán acciones como bonificaciones de impuestos locales, apoyo a la internacionalización y transferencia tecnológica.
Este modelo, inspirado en experiencias internacionales, pretende no solo atraer inversiones, sino también cultivar el talento local y fomentar el intercambio de conocimientos entre las empresas de cada zona.