El 15 de marzo se lleva a cabo una manifestación en la Piazza del Popolo de Roma, inspirada por el artículo del periodista italiano Michele Serra que aboga por la unidad y libertad de Europa. Serra expresó su anhelo de ver una gran movilización de ciudadanos europeos bajo una sola bandera, la de Europa, con el lema contundente: “Aquí se hace Europa o se muere”. Aunque la manifestación de Roma es de carácter italiano, el llamado de Serra trasciende fronteras, instando a que eventos similares se realicen en todas las capitales europeas. La idea central es recordar la importancia de una Europa unida ante la amenaza de líderes internacionales como Vladímir Putin y Donald Trump, quienes, según el autor, no desean una Europa fuerte debido a su sistemática defensa de la democracia y su potencial como competencia económica.
La situación actual plantea un dilema crítico para Europa al estar atrapada entre potencias que priorizan la ley del más fuerte. La unión europea ha sido una utopía considerada razonable, capaz de mantener la paz, prosperidad y democracia en el continente durante 80 años. Sin embargo, los desafíos actuales exigen un renovado compromiso por parte de sus ciudadanos. La narrativa promueve una Europa donde los ciudadanos reconozcan sus valores compartidos, más allá de las diferencias lingüísticas e históricas, abogando por una estructura federal que respete la diversidad. Europa se enfrenta a una encrucijada que llama a la acción colectiva para defender no solo su estructura y valores, sino también su capacidad de influir globalmente sin depender de otros poderes. La manifestación en Roma se plantea como un primer paso hacia un despertar europeo, reafirmando que su futuro depende de la unidad y determinación de sus pueblos.
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