La Fiscalía Superior de Andalucía ha comenzado a examinar la denuncia presentada por la asociación Defensor del Paciente debido a los retrasos en el diagnóstico del cribado de cáncer de mama, un problema que podría implicar negligencia en el Servicio Andaluz de Salud. En el documento registrado, se argumenta que la demora podría haber agravado la enfermedad y aumentado los costos para la sanidad pública, al no cumplir con el programa de detección precoz. Además, Izquierda Unida ha presentado otra denuncia contra la actual consejera de Salud, Rocío Hernández, y sus predecesores, acusándolos de delitos como homicidio imprudente y omisión del deber de prestar servicios sanitarios.
Paralelamente, la Asociación de mujeres andaluzas víctimas de cáncer (Amama) está evaluando la posibilidad de emprender acciones legales contra el Servicio Andaluz de Salud tras calificar los fallos como una «absoluta negligencia». Durante un encuentro planificado para esta semana, afectadas de toda la comunidad revisarán sus casos con asesores legales. El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, enfrenta crecientes críticas tras haber admitido que no se comunicaron resultados dudosos para evitar «ansiedad» en las pacientes, una decisión cuestionada por Amama. Mientras tanto, Moreno asegura que se trabaja intensamente para identificar y solucionar los errores del sistema de cribado. Indica que los fallos en los sistemas de información contribuyeron a la tardanza en su conocimiento del problema.
Leer noticia completa en El Pais.