La jueza federal Tanya Chutkan del Distrito de Columbia ha decidido cerrar el caso contra Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, relacionado con la injerencia electoral y el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021. Esta decisión se produjo después de que el fiscal especial, Jack Smith, solicitara la desestimación del caso, citando la normativa del Departamento de Justicia que impide procesar a un presidente en ejercicio. También se cerraron las acusaciones contra Trump por el manejo indebido de documentos clasificados en Florida. La defensa de Trump no presentó objeciones a la petición de la fiscalía, lo que resultó en el archivo de ambas causas.
Trump, quien afirmó durante su campaña que despediría a Smith y cerraría los casos en su contra, celebró la decisión como una victoria judicial al sostener que las acusaciones fueron motivadas por una persecución política. Este desenlace ocurre en medio de un panorama legal complicado para Trump, quien enfrenta múltiples cargos penales. Entre estos se destaca un juicio en Nueva York, donde fue declarado culpable de falsificar registros comerciales, aunque la sentencia ha sido retrasada. Además, en Georgia, Trump sigue involucrado en un caso de injerencia electoral, aunque este enfrenta problemas tras revelarse una relación amorosa entre la fiscal y un subordinado. La decisión del fiscal Smith de abandonar los casos federales representa un alivio para Trump, quien busca navegar estos desafíos legales mientras se prepara para asumir un segundo mandato en la Casa Blanca.
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