La directora de Protección Civil y Emergencias, Virginia Barcones, comunicó que la oleada de incendios que azotó a España en agosto ha terminado, marcando el fin de uno de los episodios más trágicos de incendios forestales en la historia reciente del país. Barcones señaló que el país ha pasado de un estado de «preemergencia» a un «estado de alerta y seguimiento permanente», tras la reunión del Comité Estatal de Coordinación (Cecod). Según la funcionaria, esta temporada de incendios dejó un saldo devastador de más de 400.000 hectáreas quemadas, cuatro víctimas mortales y 48 personas heridas, poniendo en evidencia la gravedad de la situación.
El acuerdo del Cecod, tomado anoche, permitió el cambio de fase tras considerar que las condiciones han mejorado significativamente. A pesar de esto, el estado de alerta actual indica que el gobierno continuará monitoreando la situación de cerca y mantendrá la coordinación de la lucha contra el fuego, disponiendo de todos los recursos necesarios para las comunidades afectadas. Este estado de seguimiento subraya la importancia de la vigilancia continua y la capacidad de respuesta inmediata ante posibles rebrotes de incendios y otras emergencias futuras.
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