El Partido Popular ha centrado el debate político sobre los recientes incendios en España responsabilizando a los pirómanos, aunque los datos oficiales indican que solo un pequeño porcentaje de fuegos son intencionados. Alberto Núñez Feijóo, líder del partido, presentó un «plan integral contra incendios» que incluye 50 medidas, destacando la propuesta de un registro nacional de pirómanos con pulseras geolocalizadoras. Feijóo busca redirigir el foco de responsabilidad hacia la prevención y planificación, criticando la falta de coordinación en las comunidades autónomas gobernadas por el PP. Estas regiones, como Galicia y Castilla y León, han sido las más afectadas, y bomberos han señalado descoordinación en las labores de extinción bajo la competencia autonómica.
En su discurso, Feijóo también criticó la gestión del Gobierno central por no responder oportunamente a la crisis y solicitó un despliegue más rápido del Ejército. Ha acusado al presidente Pedro Sánchez y a la ministra de Defensa, Margarita Robles, de actuar con retraso, mientras el PP se anticipó en medidas como la activación de ayuda europea. Además, Feijóo propone un enfoque más ágil y coordinado en la movilización de recursos públicos, y su partido prevé evaluar las medidas del Consejo de Ministros frente a las suyas. El plan integral también incluye apoyo económico para afectados, exenciones fiscales y medidas para la restauración forestal.
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