Familiares de víctimas de la pandemia residentes en centros de mayores se congregaron este miércoles frente al Tribunal Supremo en Madrid, al cumplirse cinco años de la implementación del polémico protocolo que impidió la hospitalización de ancianos durante el pico de la crisis sanitaria. Las asociaciones Pladigmare, Verdad y Justicia, Ni un paso atrás, UDP Madrid y sindicatos como CC OO Madrid y UGT Madrid lideraron la manifestación, exigiendo justicia por las vidas perdidas y declarando su intención de instaurar esta fecha, 18 de marzo, como un día de recuerdo y reivindicación. Un destacado símbolo de la protesta fueron las sillas de ruedas vacías colocadas ante la corte, con pantuflas y flores, que significaron la ausencia de sus antiguos ocupantes y la urgencia de respuestas que las autoridades todavía no han proporcionado. Los manifestantes claman por una investigación exhaustiva que determine las responsabilidades gubernamentales y fiscales en lo que denuncian como vulneraciones de derechos humanos y discriminación flagrante durante el periodo más crítico de la emergencia sanitaria.
A pesar de los esfuerzos legales, hasta la fecha, las denuncias presentadas contra la gestión de la Comunidad de Madrid, particularmente en relación a los denominados «protocolos de la vergüenza», no han tenido éxito en las cortes. No obstante, un rayo de esperanza surge con la reciente denuncia presentada por la Fiscalía de Madrid por denegación de un servicio público por discriminación, un avance que las familias esperan conduzca a que finalmente se haga justicia. Coincidiendo con este aniversario, el documental «7.291», emitido en TVE, y los intentos de la Comunidad de Madrid de minimizar la cifra oficial de fallecimientos, han suscitado una nueva oleada de indignación. Las paupérrimas condiciones en las residencias, caracterizadas por escasez de personal y recursos, persisten, impulsando a asociaciones y trabajadoras del sector a unirse y exigir mejoras significativas en futuras instalaciones. Concluyendo la concentración, los presentes reiteraron reclamos de justicia y recordaron a los fallecidos con flores blancas, reiterando su mensaje central: la tragedia no debe ser olvidada, y se debe actuar para evitar que se repita.
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