Helmut Duckadam, el legendario portero rumano conocido por su heroica actuación en la final de la Copa de Europa de 1986, ha fallecido a los 65 años. Duckadam se ganó el apodo de «el Héroe de Sevilla» tras detener cuatro penaltis en la emocionante final disputada en el estadio Sánchez Pizjuán, donde el Steaua Bucarest sorprendió al Barcelona al alzarse con el título. Aquel 7 de mayo de 1986 quedó en la memoria del fútbol europeo, cuando el equipo rumano logró una inesperada victoria ante un Barcelona que aspiraba a su primera Copa de Europa. La noticia de su muerte fue confirmada por la prensa rumana, que destacó el inmenso legado que deja Duckadam en la historia del fútbol mundial.
Marcel Puscas, ex compañero de Duckadam, expresó su tristeza por la pérdida a través de un emotivo mensaje en redes sociales, destacando la generosidad y dedicación de su amigo tanto en el plano personal como profesional. Duckadam falleció en un hospital militar de Bucarest, donde había sido hospitalizado tras complicaciones de salud que incluyeron una reciente operación a corazón abierto. Durante los últimos años, el ex portero enfrentó serios problemas médicos, requiriendo múltiples intervenciones y una exigente rutina de medicamentos diarios para manejar sus dolencias físicas. La comunidad futbolística rinde homenaje a Duckadam, rememorando tanto su brillante carrera en el deporte como su carácter afable y entrañable.
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