Falleció a los 78 años uno de los criminales más notorios de Suecia, dejando tras de sí un legado de delitos que lo mantuvieron tras las rejas durante gran parte de su vida. Conocido por una serie de delitos graves que incluyeron robos a mano armada y evasiones espectaculares de prisión, su vida delictiva lo convirtió en una figura controvertida en la historia criminal del país. Pese a sus repetidos intentos de reformarse, sus escapadas de la legalidad cautivaron a la opinión pública y alimentaron debates sobre el sistema penitenciario sueco.
Este infame personaje, cuya identidad mantuvo en vilo a toda una nación, pasó más de la mitad de su vida encarcelado. Su muerte cierra un capítulo oscuro en el archivo criminal sueco, donde su nombre quedó grabado entre los más recordados. A lo largo de los años, su historia ha sido objeto de documentales y estudios sobre la reincidencia criminal, resaltando los desafíos que enfrentan las instituciones en la rehabilitación y reintegración de individuos con antecedentes delictivos tan complejos.
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