Robert M. Wilson, influyente figura del teatro vanguardista mundial, falleció a los 83 años tras una breve enfermedad. Este jueves, el Watermill Center, institución que él mismo fundó en Nueva York, compartió la noticia en sus redes sociales, destacando su dedicación y creatividad hasta el final de sus días. Wilson, conocido por su multifacético talento como director de teatro y ópera, arquitecto y diseñador de escenografías, dejó un legado que perdurará a través de sus obras teatrales, esculturas y el propio Watermill Center. Su enfoque único y su capacidad para combinar diferentes disciplinas artísticas lo consolidaron como un renovador del teatro contemporáneo.
Su carrera ha dejado una impresión duradera en la escena internacional. Wilson, creador de un lenguaje visual minimalista caracterizado por oníricas imágenes, claroscuros y movimientos lentos, influyó en numerosas generaciones de artistas. España fue un notable receptor de su obra, con presentaciones en prestigiosos teatros como el Teatro Real de Madrid y el Liceu de Barcelona. Entre sus trabajos destacados se encuentran “Einstein on the Beach” junto a Philip Glass en Aviñón y “the CIVIL warS”, una ambiciosa parábola de las guerras civiles dividida en varios actos. Nacido en Waco, Texas, Wilson desafió las convenciones del teatro con piezas como “Deafman Glance”, dejando una impronta indeleble en el arte escénico.
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