Alvaro Vitali, célebre por su papel de Pierino en las comedias eróticas italianas de serie B, falleció a los 75 años en Roma debido a una bronconeumonía. Vitali se hizo famoso en los años setenta y ochenta con películas que, aunque consideradas de bajo nivel, llegaron a ser objeto de culto por su contenido provocador y humor irreverente. Su éxito en España coincidió con el inicio de la democracia, en un contexto de liberación tras años de censura. A pesar de que sus películas eran vistas como relictos de otro tiempo, su muerte ha resonado en Italia, ya que formaba parte del imaginario popular.
Descubierto por Federico Fellini en 1968, Vitali tuvo roles menores en películas memorables como «Amarcord», antes de convertirse en un ícono de la comedia erótica ligera. Su transición a la serie B fue en parte una necesidad económica, en una época en la que los cines eran el centro de la industria. A pesar de su breve auge, la popularidad de Pierino fue efímera, y con el cambio de gustos del público, Vitali cayó en el olvido. En sus últimos años, sobrellevó dificultades económicas y participó en realities y cabarets, dejando un legado de casi cien películas.
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