En el reciente panorama legislativo estatal de 2024, importantes avances y desafíos han surgido en la protección de los derechos digitales, con énfasis especial en temas críticos como la privacidad, la seguridad en línea de los menores, la inteligencia artificial, la competencia, el acceso a banda ancha y el derecho a reparar dispositivos. Este escenario forma parte del informe «State of State Technology Policy 2024», realizado por el Centro de Política Tecnológica de NYU, junto con la labor de defensa llevada adelante por la Electronic Frontier Foundation (EFF).
Un hito significativo en el frente de la privacidad lo representa Maryland, donde se han adoptado leyes más severas que prohíben la publicidad dirigida a adolescentes y requieren el consentimiento para procesar datos de salud. Esta legislación sitúa a Maryland a la vanguardia, uniéndose a un grupo de 19 estados que ya cuentan con normativas integrales en este ámbito. Para 2025, se anticipan nuevas leyes que abordarán la privacidad de datos genéticos, biométricos, de ubicación y salud, reflejando una tendencia hacia una mayor protección de la información personal.
En el ámbito de la seguridad en línea para menores, estados como California y Nueva York han implementado regulaciones que restringen el acceso de los jóvenes a contenido adulto en plataformas sociales y limitan las funciones potencialmente adictivas de estas aplicaciones. Pese a ciertos desafíos judiciales, estas medidas marcan un esfuerzo concertado para proteger a los jóvenes en un ambiente digital cada vez más riesgoso.
La inteligencia artificial ha cobrado relevancia, con Colorado estableciendo un precedente al exigir a los desarrolladores de IA que evalúen los riesgos de sus sistemas. Se espera que en 2025 más estados sigan este ejemplo, adoptando legislaciones que intenten mitigar la discriminación algorítmica y la manipulación en anuncios políticos generados por IA.
La competencia sigue siendo un tema candente, con esfuerzos renovados en Nueva York y California para fortalecer leyes antimonopolio que limiten el poder de las grandes corporaciones tecnológicas. Aunque los avances son paulatinos, el objetivo es construir un mercado más justo en beneficio de los consumidores.
Paralelamente, la regulación sobre el acceso a banda ancha y la neutralidad de la red se ha intensificado, dado el estancamiento federal en estos temas. Estados como California y Washington han introducido leyes para prohibir prácticas desleales de proveedores de servicios de Internet, asegurando un acceso más equitativo.
Por otro lado, el derecho a reparar ha encontrado eco en California y Minnesota, donde se han lanzado iniciativas que permiten a los consumidores reparar sus propios dispositivos electrónicos. Se anticipa que este movimiento ganará impulso en 2025, respaldado por un creciente apoyo legislativo.
Mirando hacia 2025, los legisladores estatales se preparan para mantener su papel crucial en el desarrollo de políticas tecnológicas que refuercen los derechos digitales. La dirección que se tome hoy será determinante para asegurar un futuro donde la privacidad, la equidad en el acceso tecnológico y la innovación sean pilares fundamentales.