Este jueves, Culiacán, capital de Sinaloa, vivió un estallido de violencia con decenas de camiones y autobuses incendiados, y enfrentamientos entre el Cártel de Sinaloa y el Ejército. Narcobloqueos paralizaron las principales vías tras la captura de Ismael «El Mayo» Zambada y Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo. Temores de un nuevo «Culiacanazo» resurgieron mientras el alcalde, Juan de Dios Gámez, señaló que la violencia se concentra en el área de Jesús María. La Secretaría de Seguridad estatal confirmó agresiones a personal militar y los videos de los incidentes, difundidos en redes sociales, muestran caminos obstruidos y grandes columnas de humo. Las autoridades han pedido calma a la población. Información en desarrollo.
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