Durante el debate general sobre la situación política en Andalucía, la portavoz socialista María Márquez sorprendió con su intervención, justo cuando se anunció la dimisión de Santos Cerdán de todos sus cargos en la dirección del PSOE y de su escaño. Márquez aprovechó su turno para criticar duramente al presidente de la Junta, Juanma Moreno, mencionando casos de corrupción del Partido Popular. Sin embargo, su discurso coincidió con la publicación de noticias sobre un informe de la UCO que implica a Cerdán en un posible cobro de comisiones ilegales. Pese a la gravedad del asunto, Márquez centró sus críticas en las actuaciones del PP, recordando escándalos desde la época del secretario de Estado y otros casos vinculados al partido.
Por su parte, Moreno se mostró sorprendido por el contexto del discurso de Márquez, pero aludió a la situación interna del PSOE y la falta de contención ante los casos de corrupción. En un intento de defensa, Márquez proclamó con firmeza que el PSOE corta de raíz los casos de corrupción, provocando risas y aplausos por parte de los diputados del PP. La intervención buscó animar a sus compañeros socialistas, visiblemente afectados por el escándalo de Cerdán, y dejó claro que no aceptarían lecciones del PP en materia de ética. Mientras tanto, el PP hizo referencia a los respaldos expresos de la secretaria general del PSOE a Cerdán, advirtiendo sobre las posibles revelaciones futuras.
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