En Madrid, ciudad de historia y vanguardia, cada esquina cuenta una historia, y cada monumento alberga una leyenda. Este 27 de septiembre, con motivo del Día Mundial del Turismo, se propone un viaje por algunos de los rincones más emblemáticos de la capital española, revelando curiosidades que incluso los madrileños pueden desconocer. Desde el primer «rascacielos» de la ciudad hasta un templo egipcio reconstruido piedra a piedra, Madrid es un tapeo de cultura y arte al aire libre.
Comenzando el recorrido en la Puerta del Sol, recientemente peatonalizada, nos encontramos con el famoso Kilómetro Cero de las carreteras radiales de España, un símbolo de encuentro y partida. Cerca de allí, la estatua del Oso y el Madroño, obra de Antonio Navarro de 1967, esconde un secreto: podría estar inspirada en la Osa Mayor, visible en las noches despejadas de la península.
Por otro lado, la Puerta de Alcalá, testigo del paso de Carlos III por Madrid, impone con sus casi 20 metros de altura, recordándonos la importancia de este monarca en la modernización de la ciudad. Mientras, la Plaza Mayor, con sus 377 balcones, despliega su historia desde el siglo XVII, habiendo servido como mercado, lugar de ajusticiamiento y hasta plaza de toros.
Sin abandonar el Madrid de los Austrias, la Plaza de la Villa nos remonta al Madrid medieval, destacando la Torre de los Lujanes como el primer «rascacielos» madrileño. Y avanzando hacia la Castellana, la Fuente de Cibeles nos sorprende no solo por su belleza sino por tener una réplica en bronce en Ciudad de México.
Pero Madrid también es sinónimo de cultura, como demuestra el Paseo del Arte, un corredor que aloja a tres de los museos más importantes a nivel global: el Prado, el Thyssen-Bornemisza y el Reina Sofía, juntos suman cerca de 40,000 obras de arte. Y junto a ellos, el Parque del Retiro ofrece un respiro natural en medio de la urbe, con más de 15,000 árboles.
En un recorrido que entrelaza lo ancestral con lo contemporáneo, el Templo de Debod, un regalo de Egipto a España, sorprende por su singularidad y por su historia de traslado y reconstrucción piedra a piedra, para salvarlo de la inundación por la presa de Asuán.
Madrid, con su amalgama de historias, edificios, parques y esculturas, sigue siendo un destino que invita a redescubrir sus tesoros, tanto a turistas como a locales. En este Día Mundial del Turismo, la ciudad se presenta como un museo a cielo abierto, donde cada detalle cuenta una parte de la vasta historia madrileña.
Fuente: Diario.Madrid.es