Este domingo, el CentroCentro de Madrid, un espacio cultural bajo la gestión del Área de Cultura, Turismo y Deporte, vio el cierre de la célebre exposición de pintura «Setenta grandes maestros de la Colección Pérez Simón». Esta muestra, que ha sido elogiada por la crítica, los medios de comunicación y un público fiel, ha dejado una huella significativa en el panorama cultural de la capital y ha consolidado su posición como uno de los eventos más destacados de la temporada.
Con una impresionante asistencia de aproximadamente 90.000 visitantes provenientes de diversas partes del mundo, la exposición se ha convertido en un referente internacional. A un ritmo constante de 900 personas diarias, logrando frecuentemente completar su aforo, «Setenta grandes maestros» se transformó en un centro de reunión para 700 grupos de amantes del arte. Esta efervescencia cultural ha reafirmado el compromiso de Madrid con la promoción del arte y la cultura.
Bajo la meticulosa curaduría de Susana Martínez-Garrido, Graciela Téllez Trevilla y Roberto Fernández Castro, la exposición presentó una exclusiva selección de setenta obras maestras. Figuras ilustres del arte como Bronzino, Rubens, El Greco, Murillo, Van Dyck, Renoir, Sorolla, Munch, Tamara de Lempicka, Magritte y Yoshitomo Nara fueron los protagonistas de este recorrido histórico, ofreciendo a los visitantes una experiencia única e inolvidable.
Juan Antonio Pérez Simón, el coleccionista detrás de esta incomparable muestra, expresó su emoción y gratitud ante la entusiasta recepción por parte del público y los expertos. “Para mí esta exposición ha sido un sueño cumplido”, compartió, destacando su deseo de establecer una sede permanente para la colección en Madrid, particularmente en la emblemática Serrería Belga, afirmando que esta posibilidad le produce «una profunda felicidad».
El Ayuntamiento de Madrid, representado por Marta Rivera de la Cruz, delegada de Cultura, Turismo y Deporte, también mostró su agradecimiento hacia Pérez Simón. Rivera de la Cruz elogió la «generosidad» y «encomiable labor como coleccionista» de Pérez Simón, subrayando el privilegio que ha significado para la ciudad albergar una muestra de tal importancia.
Con el cierre de «Setenta grandes maestros», Madrid reafirma su posición como un epicentro cultural de renombre internacional, ofreciendo una ventana a la grandeza del arte universal y fortaleciendo el vínculo entre los ciudadanos y el patrimonio artístico global.