En España, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha incrementado los controles a motociclistas debido al preocupante aumento de siniestros mortales entre estos usuarios de las vías. La normativa vigente requiere que todos los conductores y pasajeros de motocicletas utilicen cascos homologados, sin embargo, existe una excepción que permite a algunos motoristas circular sin casco si cuentan con un certificado médico especial. Este documento debe ser emitido por un médico colegiado por razones médicas graves y debe cumplir con la normativa vigente, aunque las condiciones específicas para obtenerlo no cubren enfermedades como la claustrofobia o determinadas condiciones de la piel.
Además de la obligatoriedad del casco, la DGT también impone a los motoristas el uso de guantes homologados y recomienda otros equipos de protección como pantalones y botas especiales para prevenir lesiones graves en caso de accidente. Estas medidas buscan no solo minimizar las fracturas óseas, sino también evitar quemaduras por contacto con el asfalto. Con estas directrices, la DGT pretende mejorar la seguridad de los motoristas, quienes representan un grupo particularmente vulnerable en las carreteras.
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