El Oktoberfest de Múnich experimentó una interrupción temporal después de que se emitiera una alerta de explosivos, según informó el alcalde de la ciudad, Dieter Reiter. El festival, que esta temporada regresó después de un paréntesis pandémico, cerró sus puertas temporalmente como medida precautoria tras registrarse explosiones y un incendio en una vivienda al sur de Alemania, incidente en el que murió una persona. La policía local confirmó que el cierre fue necesario mientras se investigaban posibles explosivos en el área donde se celebra el famoso festival de la cerveza. La alerta fue levantada finalmente, y el evento reabrió sus puertas a las 17:30, según informaron los medios alemanes.
Las investigaciones iniciales apuntan a que el incendio en la vivienda fue intencionado, posiblemente derivado de una disputa familiar. Agentes de las fuerzas especiales continúan trabajando en el caso, investigando una posible conexión entre el incendio y la amenaza de explosivos al Oktoberfest. Medios alemanes reportaron que se escucharon disparos y explosiones en el norte de Múnich, lo que pudo haber intensificado la alerta. Además, se descubrió una carta relacionada con el incidente que está siendo tratada con seriedad, y se sospecha que su autor podría ser el responsable de los sucesos. Mientras tanto, las investigaciones en la Theresienwiese, lugar del festival, continúan para garantizar la seguridad de los asistentes.
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