En el panorama político actual, las campañas electorales en España siguen una dinámica de polarización que divide a la ciudadanía en bloques ideológicos, favoreciendo la aparición de líderes populistas. Esta confrontación persistente se despliega en un contexto donde los partidos parecen menos preocupados por movilizar a los votantes con mensajes inspiradores que por asegurar su lealtad mediante la creación de enemigos comunes. A nivel europeo, las elecciones recientes han reflejado una contienda entre dos modelos de progreso que buscan establecer sus agendas en el continente. Mientras la ultraderecha gana terreno en Europa, en España, el PSOE mantiene su influencia, pese a escándalos de corrupción, gracias a una población que parece abducida por subsidios y retórica divisiva. El voto en el Parlamento Europeo se anticipa como una respuesta al orden impuesto desde fuera de Europa, con un rechazo creciente a la Agenda 2030 y al control de la burocracia de Bruselas, en favor de una defensa de los intereses de los productores y las clases medias.
Leer noticia completa en OK Diario.
Resumen de privacidad
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.