La Vuelta a España se aproxima a su desenlace con la etapa 19, un recorrido llano entre Rueda y Guijuelo. Aunque no se anticipan cambios significativos en la clasificación general, la jornada está marcada por un amplio despliegue de seguridad debido a las protestas propalestinas en contra del genocidio en Gaza realizado por Israel. A pesar de que se espera una etapa tranquila, las autoridades vigilan de cerca para prevenir cualquier altercado, enfrentando la incertidumbre sobre la llegada del evento a Madrid, donde concluye la competición.
Con el fin de semana en puerta, los ciclistas se preparan para enfrentar la desafiante etapa de montaña en la Bola del Mundo el sábado, antes de concluir el domingo en la capital española. La organización se mantiene alerta ante las tensiones y busca garantizar un cierre exitoso de la carrera. La situación política y las manifestaciones en curso han añadido un tinte de incertidumbre a esta edición de la Vuelta, a pesar del ambiente festivo y deportivo que caracteriza tradicionalmente al evento.
Leer noticia completa en El Pais.