En un ambiente cargado de tensiones, un grupo de estudiantes protagonizó una protesta el martes por la tarde durante la visita de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, a la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense. Ayuso se encontraba allí para ser reconocida como Académica de Honor de la Academia Médico-Quirúrgica Española. Sin embargo, al finalizar la ceremonia, los manifestantes desplegaron pancartas y corearon consignas en favor de la manifestación convocada para el 23 de febrero, en defensa de la educación pública. Los estudiantes expresaron su descontento por lo que consideran una insuficiente financiación para las universidades públicas y criticaron las políticas «privatizadoras» del gobierno regional, mientras que la presidenta intentaba mantener la compostura y afirmaba su orgullo por su pasado universitario.
El descontento estudiantil se enmarca en un contexto de creciente oposición frente a la nueva ley de universidades impulsada por el gobierno de Ayuso, que contempla sanciones a las movilizaciones que perturben las clases. La normativa, que ha provocado un fuerte rechazo entre la comunidad educativa, aún está pendiente de desarrollo, pero ha contribuido a exacerbar las tensiones. No es la primera vez que Ayuso enfrenta protestas en su contra en la Complutense; incidentes similares ocurrieron cuando fue nombrada «alumna ilustre» en 2022 y fueron criticadas por destacadas personas del ámbito académico. En este ambiente contestatario, persiste la interrogante sobre el futuro de la financiación y las políticas educativas en Madrid, con una comunidad universitaria que clama por ser escuchada.
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