El campus de la Universidad Nacional en Bogotá se ha visto envuelto en un escándalo tras un supuesto caso de abuso sexual que ha conmocionado a la comunidad educativa. Inicialmente, se informó de un caso de violación durante un evento conocido como los «Jueves de Freud», una popular fiesta estudiantil. Sin embargo, la mujer involucrada se retractó de su acusación y afirmó que el encuentro fue consensuado, lo que obligó a las autoridades a liberar al acusado. Durante el evento, el personal de seguridad de la universidad intervino tras sorprender a la pareja en un edificio del campus, y ambos fueron trasladados a la Unidad de Reacción Inmediata (URI) en Puente Aranda. Las circunstancias planteadas sugieren que ambos podrían haber estado bajo los efectos del alcohol.
A pesar de no haberse concretado una denuncia formal, el incidente ha reavivado críticas sobre los problemas de seguridad en el campus de la Universidad Nacional. El profesor Diego Torres, miembro del Consejo Superior Universitario, denunció las condiciones deplorables del lugar tras las fiestas, señalando un aumento de actividades ilícitas por parte de personas ajenas a la academia. El rector Leopoldo Múnera reconoció la falta de personal de vigilancia, especialmente durante la temporada de vacaciones, y admitió que las medidas de seguridad existentes no han sido suficientes. El caso ha resaltado la necesidad de implementar estrategias más efectivas para asegurar la integridad y la seguridad de los estudiantes dentro de las instalaciones universitarias.
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