Mahmoud Khalil, un activista palestino y estudiante de la Universidad de Columbia, ha sido liberado de un centro de detención en Luisiana tras pasar más de tres meses bajo custodia. La decisión fue tomada por el juez federal Michael E. Farbiarz en Newark, Nueva Jersey, quien otorgó la libertad bajo fianza a Khalil mientras se resuelve su caso. El gobierno de Donald Trump había mantenido al estudiante detenido argumentando irregularidades en su solicitud de residencia, señalando presuntos vínculos con grupos islamistas, aunque no se presentaron pruebas al respecto. Khalil fue arrestado por su participación en protestas contra la guerra de Israel en Gaza, un movimiento que Trump calificó de antisemita. Tras su liberación, Khalil expresó su decepción sobre la percepción de EE. UU. como defensor de los derechos humanos, comparando su experiencia con una realidad de desesperanza.
Mientras tanto, Noor Abdalla, esposa de Khalil, expresó su alivio por la liberación de su marido, aunque destacó que el fallo judicial no compensa las injusticias vividas por su familia y otras personas. La historia de Khalil ha ganado notoriedad como un ejemplo de la política migratoria de la administración Trump, criticada por sus medidas restrictivas hacia los inmigrantes y aquellos que protestan contra las acciones de Israel. Tricia McLaughlin, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, consideró que la decisión del juez compromete la seguridad nacional del país. A pesar de su liberación, Khalil aún enfrenta una dura batalla legal para evitar la deportación en medio de un contexto político tenso, con repercusiones significativas en la política estadounidense hacia los activistas extranjeros.
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