El Gobierno español ha dado un paso crucial hacia el fortalecimiento de su industria tecnológica con la adjudicación de 17 Cátedras Chip, una iniciativa financiada con 45 millones de euros destinada a formar a mil profesionales en el campo de la microelectrónica y los semiconductores. Este esfuerzo, parte del ambicioso Proyecto Estratégico de Microelectrónica y Semiconductores (PERTE Chip), busca no solo consolidar la industria de chips en el país, sino también fortalecer la soberanía tecnológica de toda Europa.
Desarrollado por el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, el programa se implementa a través de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales. Las cátedras, fruto de una colaboración sin precedentes con 80 empresas de sectores públicos y privados, movilizarán una inversión total de 54,5 millones de euros. Esta cifra incluye fondos provenientes de la iniciativa europea Next Generation EU. Durante un mínimo de cuatro años, la formación capacitará a nuevos talentos en un sector considerado estratégico para el desarrollo del país.
El PERTE Chip se integra en una agenda nacional destinada a reindustrializar España, poniendo un énfasis particular en el sector de la microelectrónica. María González Veracruz, secretaria de Estado de Telecomunicaciones, destacó la relevancia de cultivar talento en este ámbito crítico. Según González Veracruz, “cada persona usa miles de chips al día”, subrayando así la omnipresencia de esta tecnología en dispositivos y su importancia para robustecer el sector.
Uno de los aspectos más destacados de las Cátedras Chip es su impacto social. Ofrecen créditos de formación gratuitos, garantizando el acceso a educación de vanguardia a personas de todos los estratos económicos. Esta estrategia, afirmó González Veracruz, es un motor de crecimiento económico y movilidad social en el empleo para los ciudadanos.
Las cátedras tienen como objetivo principal dotar al país de talento especializado en diseño, desarrollo y fabricación de chips. A través de proyectos de investigación en colaboración con empresas punteras, se promueve el aprendizaje práctico y se estimula el desarrollo de tecnologías innovadoras. Además, el programa conecta a España con la vanguardia tecnológica europea, apoyado por instituciones como IMEC, que ha elegido a España para establecer su segundo centro mundial de I+D.
El Gobierno español ve en el sector de los semiconductores un componente esencial para la autonomía digital y la competitividad global. Al fomentar empleo cualificado y atraer inversiones internacionales, el PERTE Chip aspira a posicionar a España como un líder en microelectrónica dentro de Europa, preparándola para satisfacer la creciente demanda de semiconductores en la era de tecnologías avanzadas como el 5G y la inteligencia artificial.