El estudio anual sobre permisos parentales revela que, durante el año pasado, se observó una diferencia notable en la duración de las licencias solicitadas por padres y madres. En promedio, los padres pidieron una semana menos de permiso en comparación con las madres. Esta disparidad resalta las continuas desigualdades de género en la repartición de responsabilidades familiares, a pesar de los esfuerzos por fomentar la corresponsabilidad en el cuidado de los hijos.
Expertos señalan que este patrón podría deberse a varios factores, incluyendo normas culturales y expectativas laborales diferentes para hombres y mujeres. A pesar de las políticas que intentan impulsar un equilibrio, los hombres continúan enfrentando barreras sociales y profesionales que los disuaden de tomar un mayor tiempo de licencia. Esta tendencia plantea desafíos importantes para la igualdad de género, sugiriendo que aún queda trabajo por hacer para equilibrar la balanza en términos de responsabilidades familiares.
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