La cantidad de alertas de seguridad en la bandeja de entrada puede resultar abrumadora para los desarrolladores. GitHub ha identificado el reto que representa clasificar estas alertas de vulnerabilidad. Aunque Dependabot es eficaz para detectar problemas, sin una priorización inteligente, el tiempo puede malgastarse en asuntos menores, o, lo que es peor, pasar por alto problemas críticos ocultos en medio de tantas notificaciones.
Combinando perspectivas desde la seguridad y el flujo de trabajo del desarrollador, GitHub ha implementado el Exploit Prediction Scoring System (EPSS) junto con las propiedades de los repositorios para transformar el caos en claridad, facilitando decisiones informadas sobre priorización.
Hoy, el desarrollo de software no es solo escribir código, sino ensamblar aplicaciones a partir de paquetes de código abierto. Un sorprendente 96% de las aplicaciones modernas depende de software de código abierto, lo que las convierte en objetivos para actores maliciosos. Los desarrolladores, frente a innumerables vulnerabilidades reportadas anualmente, deben priorizarlas inteligentemente según la arquitectura de la aplicación y el contexto del negocio.
Muchas organizaciones confían solo en las puntuaciones de severidad del Common Vulnerability Scoring System (CVSS). Sin embargo, no todas las vulnerabilidades críticas tienen igual probabilidad de ser explotadas. Aquí entra el EPSS, que evalúa la probabilidad de que una vulnerabilidad sea aprovechada en los próximos 30 días. Mientras que el CVSS indica la gravedad del daño, el EPSS señala la probabilidad de explotación.
Para una priorización eficaz, se recomienda combinar las puntuaciones EPSS y CVSS, equilibrando probabilidad e impacto potencial. También es clave considerar si un repositorio es público o privado, si maneja información sensible y su frecuencia de despliegue. Establecer Acuerdos de Nivel de Servicio (SLA) según el riesgo ayuda a clasificar la urgencia de cada alerta.
Las reglas de auto-clasificación de GitHub facilitan la gestión de alertas de seguridad con criterios personalizados basados en diversos factores. Esto permite manejar alertas a gran escala, enfocando recursos donde más se necesitan.
Cuando la prioridad es acertada, las organizaciones experimentan mejoras significativas en gestión de seguridad. Estudios muestran que enfocarse en solo el 10% de las vulnerabilidades potencialmente explotadas puede cubrir el 87% de las amenazas, reduciendo esfuerzos de remediación en un 83%. Este enfoque no solo ahorra tiempo y recursos, sino que también fomenta una comprensión clara y colaboración entre equipos.
Para gestionar adecuadamente estas alertas, es crucial activar las actualizaciones de Dependabot, establecer reglas de auto-clasificación y definir criterios claros de priorización. Con estos pasos, los equipos no solo reducen la sobrecarga de alertas, sino que aseguran un enfoque efectivo hacia la seguridad del código, protegiendo así a sus clientes de manera eficaz.