En medio de un escenario económico desafiante, marcado por la inflación y el aumento de precios, un nuevo estudio de la Universidad de Madrid trae una dosis de optimismo al revelar que aún es posible adquirir productos básicos por menos de 8 euros. Este informe, elaborado por expertos en economía, subraya que ciertos alimentos y artículos de higiene personal permanecen al alcance del bolsillo a pesar de las dificultades.
Dentro de los descubrimientos más destacados, se encuentran frutas y verduras frescas, junto con productos envasados, que facilitan la tarea de mantener una dieta equilibrada sin exceder ese límite de gasto. Por ejemplo, con una bolsa de manzanas a un costo aproximado de 2 euros y una lechuga por 1,50 euros, el total apenas alcanza los 3,50 euros, lo que permite margen para incluir otros elementos básicos como arroz o pasta.
El informe pone en valor la relevancia de los mercados locales y las cooperativas, que no solo ofrecen precios competitivos, sino que también impulsan la economía regional. Muchos compradores se inclinan por estos puntos de venta, encontrando precios que suelen estar por debajo de 5 euros, lo que facilita la gestión del presupuesto familiar.
No obstante, el estudio también alerta sobre las posibles implicaciones en la calidad al optar por productos más económicos. Aunque es tentador reducir gastos, los expertos subrayan la importancia de no comprometer la salud a largo plazo. Optar por alimentos frescos y de temporada es esencial para garantizar un consumo adecuado.
Frente a este contexto, los especialistas animan a los consumidores a considerar estas opciones asequibles como una estrategia válida para enfrentar la crisis económica, sin sacrificar la calidad nutricional. Encontrar alternativas económicas en tiempos difíciles se presenta, por tanto, como un tema relevante en las discusiones familiares de todo el país.