En el emblemático encierro de San Fermín, celebrado en Pamplona, se vivió un momento de alta tensión cuando uno de los toros protagonizó un incidente que dejó a tres mozos arrollados a la salida de la curva de la Estafeta. El sucesivo impacto del animal, que irrumpió con fuerza en la parte más icónica del recorrido, causó gran conmoción entre los asistentes, quienes observaron con preocupación el desarrollo del episodio, caracterizado por la velocidad y la peligrosidad propias de estos eventos taurinos.
Los servicios de emergencia actuaron con rapidez para atender a los heridos, cuya condición todavía es objeto de evaluación médica. Este tipo de situaciones subraya los riesgos inherentes al festival, que cada año atrae a miles de participantes y espectadores de todo el mundo. Las autoridades han reiterado el llamado a extremar precauciones y seguir las indicaciones de seguridad para minimizar los riesgos en futuras jornadas del evento, que combina tradición y adrenalina en un ambiente festivo.
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