Jimmy Kimmel, el popular presentador y comediante estadounidense, ha dado a conocer recientemente que adquirió la ciudadanía italiana como un acto de rechazo a lo que él considera un «mal» gobierno bajo la presidencia de Donald Trump. Durante un episodio del pódcast de la comediante Sarah Silverman, Kimmel reveló que este movimiento surge en un contexto donde muchos de sus contemporáneos se están cuestionando cómo obtener la ciudadanía de otros países, a raíz de la situación política en Estados Unidos. El comediante, que tiene ascendencia italiana por parte materna, expresó que la situación en el país ha sido «increíblemente mala», superando incluso sus peores expectativas.
La crítica de Kimmel hacia Trump ha sido constante a lo largo de su carrera, marcando su programa, «Jimmy Kimmel Live!», con comentarios incisivos sobre las políticas del presidente. Esta postura le ha valido una serie de enfrentamientos con el mandatario, quien ha insinuado que Kimmel y otros presentadores, como Jimmy Fallon, están en la lista de aquellos que podrían perder sus programas. La decisión de Kimmel de buscar la ciudadanía italiana se suma a la de otras figuras del entretenimiento, como Rosie O’Donnell y Ellen DeGeneres, quienes también han optado por abandonar Estados Unidos en busca de un nuevo hogar en el extranjero.
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