La diputada federal de Morena, María Teresa Ealy, ha sido objeto de amenazas de muerte tras su insistente postura en las investigaciones por delitos sexuales y presuntos manejos irregulares de Gobierno contra Cuauhtémoc Blanco. El mensaje intimidante, adjudicado a una supuesta célula del narcotráfico, incluye datos personales y una advertencia de vigilancia constante. Ealy relaciona este acto de intimidación con su compromiso de que las investigaciones no sean desestimadas, especialmente después de formar parte de una rebelión de legisladoras que se opusieron a cerrar el caso contra Blanco. La situación ha generado gran preocupación, especialmente ante la lentitud de las autoridades para brindar protección efectiva.
La respuesta institucional ha sido escasa, con solo la Fiscalía de Justicia de Ciudad de México atendiendo su llamado urgente. La diputada ha criticado la falta de apoyo de la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados, subrayando la indiferencia incluso de sus correligionarios. Ricardo Monreal ha sido una excepción, ofreciéndole respaldo. Ealy, determinada a continuar su lucha en defensa de un país más justo y seguro, ha responsabilizado a las autoridades de cualquier daño que pueda sufrir ella o su familia ante la preocupante inacción. Su mensaje es claro: no la callarán, y seguirá trabajando por la justicia, subrayando la necesidad urgente de medidas de protección eficaces.
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