El Atlético de Madrid, dirigido por Diego Pablo Simeone, enfrenta un desafío considerable al visitar Barcelona, una ciudad con un historial poco favorable para los rojiblancos en los últimos 18 años. Desde aquella victoria en 2006, en la que Fernando Torres y Maxi Rodríguez sellaron el triunfo, el Atlético no ha logrado vencer al Barça a domicilio. Con la intención de romper esa racha adversa, Simeone ha delineado una alineación estratégica que refleja un enfoque continuista, manteniendo a la mayoría de los jugadores que han conseguido once victorias consecutivas. Entre las novedades, destaca la inclusión de Gallagher en lugar de Lino, quien se sumará a un equipo en el que Jan Oblak, Llorente, y Galán son fundamentales en la defensa, complementados por un medio campo liderado por Rodrigo de Paul, quien ha mostrado un notable avance en su rendimiento reciente.
En el ámbito de la competición por el campeonato de la Liga, el Atlético llega empatado en puntos con el equipo de Flick, aunque con un partido menos, mientras el Real Madrid observa el encuentro con interés, pues un empate podría facilitar su asalto al liderato, siempre y cuando logre vencer al Sevilla en su respectivo partido. Simeone enfatiza la importancia del trabajo en equipo y la estrategia para contrarrestar al Barcelona, cuyas fortalezas incluyen un centro del campo joven y la presencia de jugadores clave como Raphinha. Con un ataque liderado por Julián Álvarez y Antoine Griezmann, el Atlético se prepara para un enfrentamiento crucial que podría definir el rumbo del campeonato, buscando aplicar su estilo de juego colectivo para maximizar sus armas y tratar de conseguir una victoria memorable en Montjuic.
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