México enfrenta un fin de semana marcado por desastres naturales tras las intensas lluvias que han provocado serias inundaciones en distintas regiones del país. Hasta ahora, se han registrado 37 muertos en cuatro estados: Veracruz, Puebla, Hidalgo y Querétaro. Las autoridades han activado medidas de emergencia, como los planes DN-III-E y Marina, para asistir a las más de 55,000 viviendas afectadas y los damnificados que se encuentran en los 117 municipios más impactados. En Veracruz, se han reportado las peores lluvias en años, dejando comunidades incomunicadas y miles de personas en refugios temporales.
La presidenta Claudia Sheinbaum ha destacado la importancia de la cooperación interinstitucional para enfrentar la crisis, mientras que los estados más golpeados siguen evaluando los daños. En Hidalgo y Puebla, las lluvias han dejado comunidades y colegios dañados, además de varios deslizamientos de tierra. La situación es igualmente grave en Querétaro, donde los esfuerzos de rescate continúan activos. Las inclemencias son atribuidas al paso de la tormenta tropical Raymond y el huracán Priscila, dejando a México en alerta debido al pronóstico de lluvias continuas durante los próximos días, lo que mantiene a la población en constante vigilancia y buscando urgentemente el apoyo institucional para mitigar los daños.
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