En la reciente cena benéfica de Al Smith, el expresidente Donald Trump se convirtió en el centro de atención con su discurso cargado de comentarios polémicos y sarcásticos dirigidos principalmente contra la vicepresidenta Kamala Harris. Trump inició su intervención resaltando la importancia de la comunidad católica, instando a que voten por él, mientras recordaba la ausencia de Harris, haciendo alusión a su falta de asistencia. Durante el evento, Trump no escatimó en burlas hacia Harris, sugiriendo que podría haber asistido si los fondos de la cena se destinaran a «rescatar a los alborotadores de Minneapolis» tras las protestas de 2020 por George Floyd. Estos comentarios generaron vítores del público presente, evidenciando el tono desenfadado de la noche. Asimismo, el expresidente apeló a la historia política para hacer un paralelismo entre Harris y Walter Mondale, el último demócrata en faltar al evento, quien perdió estrepitosamente en las elecciones de 1984.
Continuando con su discurso, Trump no se detuvo en sus críticas y calificativos hacia Harris, refiriéndose repetidamente a ella como «rara», un término que ha sido utilizado previamente en el ámbito político contra él y su equipo. En un tono humorístico, Trump bromeó sobre las consecuencias de faltar a la tradicional cena, haciendo alusión a «cosas malas» que podrían suceder. Sus comentarios fueron bien recibidos por la audiencia, lo que incluyó un momento jocoso con el alcalde de Nueva York, Eric Adams, donde compartieron anécdotas personales sobre ser el centro de ataques. En otro momento del discurso, Trump sorprendió con una insinuación sobre las intenciones del presidente Joe Biden de postularse nuevamente, aunque no aclaró si era un comentario serio o una broma, y también realizó una referencia a Barack Obama llamándolo por su segundo nombre, Hussein, reviviendo teorías conspirativas sobre su origen. Estos comentarios subrayan el estilo provocador que sigue caracterizando al expresidente en sus apariciones públicas.
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